En julio nos hemos dado una escapada a la playa, a Benidorm, para más señas, en la provincia de Alicante, a cuatro horas en coche desde Madrid. No era mi playa preferida por la multitud, pero con una excusa profesional, hemos aprovechado y descubierto un montón de encantos.
Hay dos playas principales, Levante y Poniente, en paralelo a los meridianos terrestres, y una isla muy característica, L'Illa de Benidorm, con su propia leyenda de amor, caballeros y damas.
La sobreabundancia edificatoria a escasos metros de la orilla ha sido muy criticada por profesionales de la arquitectura, pero sigue siendo lugar predilecto vacacional para multitud de personas a las que eso no parece molestarles.
Benidorm cuenta con el edificio residencial más alto de Europa, el Intempo, reconocible por sus dos torres unidas en la parte superior por un cono invertido, y testigo de saltos BASE (deporte extremo de salto en paracaídas).
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